Invirtiendo sin Complicación: Análisis de mi Cartera de Inversión
En este post voy a echar un vistazo a mi portafolio de inversiones en mi cuenta de brokerage. Aunque no entraré en cifras totales de inversión, sí hablaré sobre la filosofía que sigo, los diferentes tipos de activos que poseo y otros aspectos clave de mi estrategia.
Vanguard Robo Advisor
Como he mencionado en otras ocasiones, soy un ferviente admirador de John Bogle y de la filosofía de inversión de Vanguard. Y no lo digo solo de palabra: realmente aplico los principios de Bogle en mi vida financiera e invierto en fondos de Vanguard mes con mes. Dicho esto, no gestiono mi cuenta de brokerage por mi cuenta, sino que utilizo la ayuda de un Robo Advisor para automatizar y optimizar el proceso sin tener que preocuparme por nada.
Si no sabes lo que es un Robo Advisor, te lo explico rápidamente: un Robo Advisor es un servicio digital que utiliza algoritmos para ofrecer asesoría financiera e invertir tu dinero de forma automatizada, sin intervención humana. Basado en tus objetivos y perfil de riesgo, construye un portafolio diversificado, lo rebalancea periódicamente por ti y reinvierte automáticamente cualquier dividendo o ganancia de capital. Una de sus principales ventajas es el bajo costo. Además, los Robo Advisors ofrecen otras funciones en las que no profundizaremos aquí, como el Tax Loss Harvesting y el Cost Basis Method (MinTax), que son estrategias diseñadas para generar beneficios fiscales para el inversionista.
Según Morningstar, la comisión promedio de los Robo advisors es de apenas 0.25% al año, mucho menos que lo que cobran los asesores tradicionales de fondos de inversión. Como ya se ha mencionado, los altos costos asociados a estos fondos suelen ser uno de los principales obstáculos para obtener mejores rendimientos a largo plazo. Para ponerlo en perspectiva, un Robo Advisor te cobraría apenas 2.50 dólares al año por cada 1,000 invertidos.
Cartera de Brokerage y Metodología de Inversión
A la fecha en que se escribió este post, mi cartera en la cuenta de brokerage, manejada completamente por el Robo Advisor, puede observarse en el gráfico siguiente. Aunque la tabla pudiera parecer compleja o sobre diversificada a simple vista, la realidad es que aproximadamente el 97 % de mi portafolio está conformado por tres ETFs: VTI, VXUS y VEA. En esta entrada, nos enfocaremos en analizar estos tres.
Asimismo, me gustaría compartir brevemente la metodología que sigo para invertir en mi cuenta de brokerage. La verdad es que es muy sencilla. Como tal vez ya notaste, me encanta la automatización de procesos: no me gusta lo manual, y lo mismo aplica para mis inversiones. Quiero que todo suceda sin que yo tenga que mover un dedo.
Por este motivo, tan pronto como recibo mi quincena o mensualidad, mi banco transfiere automáticamente una parte de ese dinero a mi cuenta de brokerage. Lo que invierto mes con mes corresponde al 20 % de mi salario. Esta estrategia de inversión, como probablemente sabes, se conoce como Dollar Cost Averaging (DCA). Además, vale la pena mencionar que tengo un perfil de inversión agresivo 😈.
El Portafolio Diversificado
Basado en la proporción que el Robo Advisor tiene en mi cartera, cumple con la sencillez de un portafolio compuesto por solo dos o tres ETFs. Ahora analicemos el nivel de diversificación que ofrece al revisar estos ETFs, y aprovecharemos para repasar algunos conceptos clave sobre inversión en general.
El VTI, como su nombre lo indica, es el fondo cotizado de Vanguard que sigue todo el mercado accionario de los Estados Unidos. En mi caso, también se considera una inversión en Domestic Stock, ya que resido en este país. Su objetivo es replicar el rendimiento del índice CRSP US Total Market, el cual representa prácticamente todas las empresas que cotizan en bolsa en EE. UU., incluyendo compañías de gran, mediana y pequeña capitalización, aunque la mayor parte del fondo está invertida en empresas de alta capitalización bursátil (large blend).
Además, está diversificado entre empresas de crecimiento (growth) y de valor (value). Este fondo es gestionado de forma pasiva, tiene un índice de gastos de 0.03 %, y utiliza un enfoque de muestreo representativo del índice, en lugar de una replicación completa. Elaboremos en todo lo que hemos dicho para entender la metodología de este índice y los otros:
Un índice bursátil es una medida que refleja el comportamiento o desempeño de un sector, un país, una región o incluso del mercado global. Funciona como un indicador que permite seguir la evolución de esa parte del mercado a lo largo del tiempo.
La capitalización bursátil, también conocida como market cap, es una forma de medir el tamaño y el valor de una empresa según el mercado. Se calcula multiplicando el número de acciones en circulación por el precio actual de cada acción, y básicamente representa el valor total de todas las acciones de una empresa que cotiza en bolsa.
Las growth companies son empresas con alto potencial de crecimiento en ingresos o participación de mercado. Suelen operar en sectores innovadores, como tecnología, y reinvierten sus ganancias para seguir expandiéndose, por lo que rara vez reparten dividendos. En cambio, las value companies tienen ingresos estables, operan en sectores maduros y crecen de forma moderada. Suelen ofrecer buena rentabilidad sobre el capital, repartir dividendos y mantener una gestión financiera sólida.
La gestión pasiva es una estrategia de inversión que busca replicar el rendimiento de un índice de mercado específico, en lugar de intentar superarlo activamente. En lugar de comprar todos los activos del índice, suele seleccionarse una muestra representativa que permita imitar su comportamiento general. Por otro lado, la gestión activa implica que un gestor selecciona valores específicos con el objetivo de superar el rendimiento del mercado. Este enfoque suele implicar mayores costos y comisiones debido al análisis constante y la toma de decisiones que requiere.
Un ETF puede (o no) comprar directamente los activos reales (acciones, bonos, etc.) que componen el índice que replica. Si los compra, puede adquirir todos los componentes del índice en las mismas proporciones, lo que se conoce como replicación completa. Alternativamente, si el índice es muy amplio o difícil de replicar por completo, el ETF puede optar por comprar una muestra representativa, lo que se conoce como muestreo.
Por otro lado, el VEA replica el índice FTSE Developed All Cap ex US, el cual mide el comportamiento del mercado accionario de países desarrollados, excluyendo a Estados Unidos. Al igual que otros fondos amplios, incluye compañías de gran, mediana y pequeña capitalización, aunque está mayormente concentrado en empresas de alta capitalización bursátil. También está diversificado entre empresas de crecimiento y valor. A diferencia del VTI, este fondo no selecciona solo una muestra representativa del índice, sino que busca replicarlo directamente comprando los mismos activos y en misma proporción, con el objetivo de obtener un rendimiento prácticamente idéntico al del índice.
Por su parte, el VXUS replica el índice FTSE Global All Cap ex US, el cual mide el comportamiento del mercado accionario de países desarrollados y emergentes( como China, Sudáfrica y Brasil ). Sigue la misma filosofía que el VEA y el VTI en cuanto a su enfoque en empresas de alta capitalización bursátil, y está diversificado entre compañías de crecimiento y de valor. Al igual que el VEA, replica el índice de manera completa.
Para terminar esta sección, solo quisiera mencionar mi pequeña participación en VWO, un fondo que invierte en acciones de empresas ubicadas en mercados emergentes de todo el mundo, como China, Brasil, Taiwán y Sudáfrica. Es decir, países con economías en crecimiento y en proceso de desarrollo, que aún no cuentan con la estabilidad ni la madurez de los países desarrollados.
Su objetivo es seguir de cerca el rendimiento del índice FTSE Emerging Markets All Cap China A Inclusion, el cual incluye empresas de mercados emergentes, entre ellas acciones “Clase A” de China, que anteriormente no estaban disponibles para inversionistas extranjeros.
Este fondo tiene un alto potencial de crecimiento, pero también un mayor nivel de riesgo. Es decir, el valor de sus participaciones es más volátil, por lo que su rendimiento puede fluctuar más bruscamente que el de fondos que invierten en países desarrollados.
Diversificaciones
A partir de los mapas anteriores, podemos notar que el fondo del Robo Advisor presenta cierto grado de superposición. Pero, ¿qué tanto se intersectan realmente? Resulta que todos los holdings de VEA están incluidos dentro de VXUS. De hecho, aproximadamente el 50 % de VXUS está compuesto por VEA. La principal diferencia entre ambos fondos es que VXUS incluye también mercados emergentes, mientras que VEA se enfoca únicamente en mercados desarrollados.
Del mismo modo, VWO está completamente contenido dentro de VXUS, ya que cubre exclusivamente mercados emergentes. Cabe destacar que los pesos de los holdings no necesariamente son idénticos entre estos fondos. Puedes encontrar más información sobre la intersección de fondos en ETF Research Center. En resumen, mi portafolio probablemente esté compuesto, a grandes rasgos, por un 63 % en EE.UU. (mercado doméstico), 26 % en mercados desarrollados y 11 % en mercados emergentes.
Algo que siempre quise analizar, más allá de la intersección entre los fondos, es su nivel de diversificación total, tanto geográfica como sectorialmente. Para ello, me basé en la información publicada por ETF Database, que también es la fuente principal de muchos de los datos presentados aquí. A partir de ese análisis, llegué a las siguientes conclusiones:
Conclusiones
En resumen, mi portafolio refleja una estrategia simple, automatizada y bien diversificada, construida sobre principios sólidos como la filosofía de Bogle y el uso disciplinado de herramientas como los Robo Advisors. A través de una asignación mayoritaria en tres ETFs clave, consigo una exposición global que abarca tanto mercados desarrollados como emergentes, diferentes sectores económicos y múltiples niveles de capitalización bursátil.
Gracias al enfoque pasivo, los bajos costos y la automatización de procesos como el rebalanceo y la reinversión de dividendos, mi portafolio no solo se alinea con mis objetivos de largo plazo, sino que también me permite mantener una gestión eficiente sin complicaciones y con ciertos beneficios fiscales.
Por último, este análisis me ha permitido confirmar que, a pesar de cierta superposición entre los fondos, mi portafolio mantiene una amplitud suficiente para mitigar riesgos y aprovechar oportunidades en distintas regiones del mundo.
Espero que hayas disfrutado esta lectura y que te animes a ver que invertir en la bolsa no tiene por qué ser complicado. Ojalá también te inspires a comenzar —o continuar— invirtiendo cada centavo que puedas, para que tu dinero trabaje por ti mientras tú te dedicas a hacer lo que más te gusta.